ESTAR EN TU...PIEL...

Quizás estamos tan encerrados en nuestro hoy, ahora, lo k percibimos, lo k sentimos...ensimismados dentro de nuestros propios cuerpos, que muchas veces no somos capaces de darnos cuenta de lo k perciben los demás, todos los seres humanos somos diferentes y captamos nuestro entorno de múltiples maneras, lo cual produce en ocasiones que no podamos aprehender lo que nos quieren comunicar las personas más cercanas a nosotros y nosotras.

Tú percibes la realidad de una manera, yo la veo de otra...y ella/él la mira con otro lente...entonces... ¿Cómo logramos volar desde nuestro cuerpo e insertarnos en aquella persona que estimas de tal manera...que deseas saber cómo siente...cómo piensa...por qué actúa de tal y cual manera...qué percibe de ti...?

Al fin de cuentas esa persona lucha por ti en el día a día...a cada momento está guardando trozos de memoria dedicados a tú ser...y tú no lograr absorver sus cuidados, no alcanzar a ver más allá de lo que tú limitada red de huesos, piel, sangre, músculos. órganos...puede captar con su restringida gama de posibilidades.

Pero están ahí, esa dedicación infinita está presente en cada suspiro...la tregua está en saber percibirla...

y luego retribuírla. Cuando se aprende a observar lo que sus ojos ven, a tocar con sus manos,

a oír lo que le susurran, a caminar por su sendero...a sentir como siente...se conquista la magia que tiene un lenguaje de símbolos y códigos en común...y adquieres el poder necesario para retribuir sus dedicaciones infinitas y desinteresadas...hacia tu persona...